Sabiéndome afortunad@ de que cada día es una oportunidad de desarrollarme y desenvolverme en todos los sentidos, así mismo, me puedo dejar llevar por el flujo de lo superfluo, de lo cotidiano, comparando mis acciones, mis talentos y hasta mi vida con personas y situaciones de mi alrededor.

Y es entonces cuando es bueno reflexionar, de las bondades de las que soy bendecid@.
De la capacidad que tengo para tomar mis propias decisiones y siempre elegir por y para mi más alto bien.

Algo que definitivamente me ayuda a mantener este pensamiento siempre presente, son herramientas como el decreto. Decreto sencillo con el cual me sienta sintonizad@.
Un ejmplo de ello es:

“DECRETO MI DÍA SIN OBSTÁCULOS”

Son estas pequeñas intenciones que ayudan a mi mente a ubicarme en una mejora constante. Llamando a las cosas y situaciones que para mí no son consideradas de agrado, entonces las convierto en obstáculos.

Puedo ser una infinidad de ellos, si de esa manera le doy el poder, o bien pueden ser perfectas opotunidades de disfrutar.
Un buen ejemplo sería:

“Si para una tarde lluviosa y fría: puedo pensar, qué fastidio de día, o bien puedo ponerme feliz y aprovechar este día maravilloso y saber que estrenaré mi chamarra nueva".

Finalmente en muchas ocasiones los “obstáculos” son formados sólo en mi mente, confundiéndolos tal vez con “límites” (que de eso podemos hablar en otro momento).

Entonces voy forjándome la vida con decretos - decisiones que envuelvan mi vibra en momentos que nutran mi ser y existir.

                    -Maya.